Oswaldo Guayasamín
"Lloré porque no tenía zapatos hasta que vi a un niño que no tenía pies ".. famosa cita de Guayasamín
Información personal
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Nombre de nacimiento
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Oswaldo Aparicio Guayasamín Calero
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Nacimiento
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6 de julio de 1919
Quito Ecuador |
Fallecimiento
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10 de marzo de 1999
(79 años) Baltimore Estados Unidos |
Nacionalidad
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Ecuatoriano
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Educación
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Educación
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Escuela de Bellas Artes de Quito
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Oswaldo Guayasamín (Quito, 6 de julio de 1919 - Baltimore,
10 de marzo de 1999) fue un destacado pintor, dibujante, escultor, grafista y muralista
ecuatoriano.
A sus siete años, Oswaldo ya revela su vocación artística y pinta sus primeras obras, desvelándose por encontrar un lenguaje propio, utilizando leche que le cedía su madre, alimento de su hermano recién nacido, para disolver las pastillas de acuarela.
Sin embargo su vida
académica fue complicada. Fue expulsado de seis colegios por “falta de talento”
y mientras su padre lo forzaba para que fuese un chico normal, como sus
hermanos, que estudiaban una profesión, Guayasamín estudia el rostro -en serio
y en broma- de sus maestros que lo sacaban de clase por la ofensa de
caricaturizarlos, uno de ellos llegó a decirle «hazte zapatero... porque no
sirves para nada». Excepto para pintar.
Con desilusión de
parte de su padre, que pierde un doctor en algo, entra en 1933 a la Escuela de
Bellas Artes y allí también choca con los moldes y las tradiciones pero pronto
es el alumno más destacado y al mismo tiempo el mejor maestro. Sus cuadros
impactan a todos cuantos los ven.
OBRAS
Los Mutilados, 1976.
Pintura relacionado a la Guerra Civil española.
Un detalle
importante es que está compuesto por 6 piezas movibles, las cuales se
pueden intercambiar en cualquier combinación y siempre van a coincidir
unas con otras. Este trabajo le tomó a Guayasamín 8 años en realizar, y
posibilita más de un millón de combinaciones.
Lágrimas de Sangre.
Este cuadro está dedicado a 3 personajes chilenos a los cuales Guayasamín admiraba profundamente.
Estos eran Salvador Allende, Víctor Jara y Pablo Neruda, el último gran amigo del Maestro.
El cuadro es reacción a los acontecimientos sucedidos durante la dictadura militar de Augusto Pinochet en Chile.
Playa Girón.
Playa Girón está localizada en la Bahía de Cochinos, en Cuba, y fue
el lugar donde en 1961 desembarcaron las tropas de exiliados cubanos
patrocinados por el gobierno norteamericano con intenciones de invadir
la isla.
Estas fueron derrotadas en las siguientes 72 horas, pero las
casualidades para el ejército cubano fueron enormes. En este cuadro
Guayasamín quiere mostrar el sufrimiento de las familias que perdieron a
sus hijos en esta batalla.
Mujeres Llorando I - VII.
Es un grupo de siete obras que representa el sufrimiento del pueblo español durante su guerra civil.
Cada familia perdió un esposo, un hermano, un hijo. En última instancia, solían ser las mujeres las que quedaban para lamentar su ausencia. Es por esto que las formas de cada mujer se parece a la de un ataúd, mientras que sus expresiones demuestran las reacciones más comunes: dolor, angustia, oración, resignación.
Madre de la India.
Al final de la década de los sesentas Guayasamín viajó a la India y
quedó sorprendido por la enorme miseria que se podía ver en todo el
país. Miles de personas mendigando en las calles, miles de niños con
hambre. La imagen que más le afectó, tomando en cuenta el fuerte lazo
emocional que tuvo con la imagen materna, fue la de una madre famélica
que de todas maneras intentaba alimentar a su hijo con leche de su
pecho. Este cuadro lo pintó en reacción a esta escena tan desesperanzada
La Marimba.
La obra representa la danza y la música del pueblo de Esmeraldas, una
comunidad áfrico-descendiente de Ecuador que al ritmo de los tambores
bailan para ahogar sus penas y alegrar el alma.
Puente de la Alameda.
Ubicado en el parque de la Alameda en Quito, donde funcionaba la Escuela de Bellas Artes, lo característico de este parque son las canoas de madera que paseaban alrededor de la laguna
Patio Interior.

Una casa colonial construida con paredes gruesas de adobe y cubierta de
madera, ubicada en el centro de Quito, cerca de la iglesia Basílica.
Allí Guayasamín vivió junto con sus padres y hermanos hasta después de
su primer matrimonio.
Madre y niño, 1848.
Es un tema recurrente en sus pinturas, el retrato de madres y niños
juntos, que para él era la representación más grande del amor. Este
cuadro en específico se puede considerar un precursor de la colección
que más tarde se llamaría “Ternura”, dedicado a su madre y a todas las
madres del mundo.
La Espera I - XI.
Es un grupo de 11 obras acerca de la violencia que sufrió el pueblo
judío durante la Segunda Guerra Mundial. Es la representación de rostros
y cuerpos, del estado anímico de los judíos que esperaban el momento de
su muerte en las cámaras de gas. Predominan los grises y negros, que
demuestran su luto y resignación a la muerte.
Cabeza de Napalm.
El rostro de personas inocentes durante los bombardeos a Hiroshima y Nagasaki antes de su muerte.
Angustia y desesperación, dolor y sufrimiento, son los temas
fundamentales en las pinturas de la Edad de la Ira porque Guayasamín
creía que la crueldad que el hombre comete en contra del hombre necesita
ser condenada una y otra vez, para que la humanidad no las olvide y no
se repita.
Homenaje a Tania I, II y III.
"...cuando lentamente me fijo en sus Retratos, ¿Cómo no
percibir el estreñimiento de esa fuerza artística que de pronto nos
introduce en el cuadro y nos hace sentirnos como parte del cuadro, como
si cada desgarramiento de la desesperación fuera un desgarramiento
propio que nos esta urgiendo la carne adolorida?" HECTOR P. AGOSTI
Los niños muertos.
Este cuadro describe un hecho que marcó muchísimo la vida de Guayasamín.
Cuando tenía 13 años sucedió en Quito la llamada "Guerra de los Cuatro
Días", donde su único amigo, Manjarrés, se vio alcanzado por una bala
perdida. Esta muerte sin sentido de su entrañable amigo dejó una huella
profunda sobre las consecuencias de la violencia del hombre.
Estudiantes de la Escuela de Bellas Artes.
Este cuadro está hecho sobre un tipo de tela muy especial, que
demuestra los orígenes humildes de Guayasamín.
Guayasamin hace un autor retrato junto a sus compañeros de la Escuela
de Bellas Artes, con quien compartió sus estudios. También retrata a
quien sería su esposa, Maruja Monteverde.
Los Trabajadores, 1942.
Retrata un grupo de personas que regresan de un largo día de trabajar la
tierra, descalzos, con apenas las herramientas necesarias, demostrando
las condiciones precarias en la que la mayoría de campesinos trabajaban
en esa época, y que se sigue repitiendo en nuestro tiempo. Sin embargo,
también se puede percibir en ellos la solidez y fortaleza de la raza
indígena.
"Pese a todo, no hemos perdido la fe en el hombre, en su capacidad de
alzarse y construir, porque el arte cubre la vida. Es una forma de amar."
Oswaldo Guayasamín
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